Todo pasa por algo
Los encuentros inesperados se comienzan a hacer mi experiencia favorita. Ayer recibí el mejor regalo que probablemente he recibido en años. Muchas veces en la vida me han dicho que las cosas pasan por algo. Jamás creí cien por ciento en esas palabras, pero trataba de tragármelas y creérmelas para hacer así más fácil el día a día. Este año ha sido singularmente extraño, pareciera que han en pasado ya muchos años desde el enero de este mismo año. He vivido vidas tan paralelas en este corto tiempo que casi no creo que fuese yo la misma persona que despertó el primero de enero y la que escribe el día de hoy. Una montaña rusa de la vida, otro año más. Sin duda cosas hermosas, aciertos, errores, risas, lágrimas y mucho aprendizaje, pero al final y sin saber mucho por qué me sentí un poco vacía. Sentí que estaba viviendo una vieja película que ya entendía, conocía el principio y me sé de memoria el final. Con sinceridad confieso que empezaba a cansarme de sólo regresar la película y ...